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miércoles, 11 de julio de 2018

Por qué la propuesta de reforma del código penal de la Ministra de Igualdad es una burrada de proporciones épicas


Tengo bastante abandonado el blog últimamente, soy consciente de ello. No es que haya perdido el interés por él, es que sencillamente no me da el tiempo. Tengo mucho trabajo (afortunadamente) tanto en el despacho como fuera de él, y cuando tengo un poco de tiempo libre lo dedico a leer o a escribir mi nueva novela. Sin embargo, no quiero dejar de postear aquí, porque llevo muchos años con este blog a cuestas y ya es un poco como mi casa.

Así que hoy he sacado un ratito para compartir un artículo sobre algo que me tiene muy quemada: los despropósitos jurídicos que anda soltando la gente, en redes sociales e inclsuo fuera de ellas, desde que salió la sentencia de la Manada. El último ha sido el de la Ministra de Igualdad del nuevo gobierno del PSOE, que me ha movido a escribir este post con la esperanza de que la gente lo lea y entienda hasta qué punto supone una burrada, y hasta qué punto la prensa y las redes sociales están manipulando la realidad.

Vaya por delante: no soy una persona de izquierdas, al menos como se entiende la izquierda en este país. Es algo que nunca he ocultado (no tendría por qué, no es nada malo). Sin embargo, a pesar de no ser de izquierdas soy capaz de valorar una buena idea aunque venga de un gobierno izquierdista. Valoré positivamente, por ejemplo, la ley de matrimonio homosexual del PSOE. También soy capaz de criticar una mala idea aunque venga de un gobierno de derechas. Valoré negativamente, por ejemplo, la ley de amnistía fiscal del PP, y me alegré cuando el Constitucional la tumbó.

Con esto quiero decir que soy capaz de ser crítica al margen de la ideología; no valoro una idea en base a quién la proponga sino por sí misma. Es algo que creo que todos deberíamos hacer, porque no hay nada más pernicioso en política que el corporativismo y el fangirlismo.

Ahora, la Ministra de Igualdad del PSOE ha propuesto una idea: reformar el código penal para que, atención a la frase, "si una mujer no dice sí expresamente, todo lo demás es no".
Muy bien, analicemos por qué esa propuesta es una BURRADA.

1) "Si una mujer...": Se carga el principio de Igualdad, cambiando el tipo penal según la víctima sea de sexo masculino o femenino. El precedente de ésto más cercano en España es el código penal franquista, donde el delito de adulterio era penado de forma diferente según la víctima fuera el hombre o la mujer.

2) "No dice sí expresamente...": Si exigimos consentimiento expreso, entonces se está negando la posibilidad del consentimiento tácito. ¿Y qué es el consentimiento tácito? Pues lo que hacemos TODOS con nuestra pareja: se nos acerca, nos besa, se nos pone mimosona, nosotros respondemos y polvo al canto. Nadie ha preguntado: "¿deseas tener relaciones sexuales conmigo?", ni ha habido una respuesta en plan "Sí, acepto", pero tácitamente ambas personas han consentido en acostarse juntas. Si ya no cabe el consentimiento tácito, jamás podríamos volver a despertar a nuestra pareja por las mañanas con un beso en los labios y una caricia, porque se trataría de un abuso sexual (no ha podido dar consentimiento explícito, está dormido). Significa que si estás junto a una persona y hay una química alucinante, en lugar de atreverte a darle un beso tendrás que decirle "disculpa, pero en estos momentos tengo ganas de besarte, ¿me das tu expreso y libre consentimiento?", o estarás cometiendo un delito. Significa, además, que jamás podrás volver a tener contacto sexual alguno con tu pareja si alguno de los dos ha bebido alcohol, porque al estar "contentillo" el consentimiento podrá suponerse viciado y también se considerará delito.

3) "Todo lo demás es un no": Esto vendría a significar que toda relación sexual es una violación a no ser que exista consentimiento expreso por parte de la mujer. No sé si os dais cuenta en toda su magnitud de lo que ello implica. Hasta ahora el sexo siempre se ha considero un acto placentero y libremente consentido por ambas partes salvo prueba en contrario, porque ESO ES LO QUE ES conforme a su naturaleza. La reforma planteada por la Ministra de Igualdad implicaría convertir el sexo en un acto dañino por naturaleza, al mismo nivel que el robo. Cuando alguien se lleva algo nuestro, se presupone que ha sido contra nuestra voluntad a no ser que demos consentimiento expreso (por ejemplo, si un amigo se lleva un libro de tu casa te lo está hurtando a menos que te pida permiso o tú mismo se lo hayas prestado). La Ministra pretende que con el sexo ocurra lo mismo, al menos si se trata de sexo heterosexual o lésbico, ya que implica necesariamente una mujer para otorgar el consentimiento expreso.

Aparte, está el tema de cómo probar dicho consentimiento expreso, porque las relaciones sexuales suelen llevarse a cabo en la intimidad. ¿Vale sólo con testimonio de la supuesta víctima? Porque si es así cualquiera puede ir a denunciar mañana mismo a su pareja, afirmar que en la última relación no dio su consentimiento explícito y mandarlo directamente a prisión. Harán falta más pruebas, ¿no? ¿Cómo lo probamos? ¿Firmando un documento antes de follar? Pero claro, tampoco sirve, podría una arrepentirse al mitad del tema. ¿Habrá entonces que grabar todas las relaciones sexuales que tengamos, para acreditar el consentimiento expreso y continuado? ¿O directamente follamos ante notario?

He llegado a leer comentarios (completamente en serio) que daban como brillante solución invertir la carga de la prueba. os copypasteo uno que resume bastante bien la burrada:

"Quizás deberían probar los presuntos violadores que fue una relación consentida y deseada en lugar de tratar a la presunta víctima de mentirosa. Por desgracia parece que se juzga mas a la victima que al agresor".

Este comentario es la MAYOR ANIMALADA JURÍDICA que se pueda imaginar. Se trata de una absoluta falacia, porque en la violación, como en cualquier otro delito, no es que a las víctimas se las presuma mentirosas, es que al acusado se lo presume inocente, según la famosa presunción de inocencia que aparece tanto en la Constitución como en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Esa presunción no significa que las víctimas de los delitos se presuman mentirosas, significa que si a una persona se la acusa de haber cometido un delito es la acusación la que debe probar la culpabilidad, no el acusado su inocencia, y que no se le puede condenar sin pruebas. Por eso, con lo de "el presunto violador es quien debería probar" te cargas la presunción de inocencia. Siguiendo esa lógica yo voy a comisaría ahora mismo, denuncio por violación a quien me dé la gana, y si no puede demostrar que NO lo ha hecho, le caen veinte años de prisión.

A ver, almas de cántaro, ¿cómo va a probar alguien que NO ha hecho algo? ¿Cómo os pruebo yo que no maté a Yeremi Vargas, que no he atracado el banco de la esquina o que no he violado a mi vecina del quinto? Esto, que se llama "probatio diabolica" o "prueba inquisitorial" (típica del derecho penal medieval), es algo que NO PUEDE existir en un Estado de Derecho que respete la Declaración Universal de los Derechos Humanos, porque según ésta, TODO EL MUNDO tiene derecho a ser considerado inocente a menos que se demuestre lo contrario, con lo cual no tiene sentido probar la inocencia de alguien que ya es legalmente inocente por no aparecer pruebas de su culpabilidad, ya que la ley presume inocentes a todos aquéllos cuya culpabilidad no se pueda demostrar.

Por supuesto, esta reforma jurídica no podrá aprobarse JAMÁS, ya que el Tribunal Constitucional y el TEDH la tirarían atrás de inmediato, pero que la izquierda está dispuesta a aprobarla ya me parece sumamente preocupante. Y me parece preocupante porque sólo hay dos opciones: o les importan una mierda los derechos humanos y los principios rectores del Estado de Derecho y creen que se puede pasar por encima de ellos cuando lo exige una determinada ideología, o desean conscientemente engañar y manipular a sus electores mediante la demagogia de ofrecerles la expectativa de una reforma que ellos saben que es imposible.
Ninguna de las dos opciones me parece muy halagüeña. Y del mismo modo que yo abominé en su día de la reforma fiscal y la trama Gürtel del PP, creo que todos los ciudadanos de bien, objetivos y con espíritu crítico deberían abominar de esta propuesta de la Ministra de Igualdad. Aunque sean feministas y de izquierdas. Porque si para legislar conforme al feminismo y a la izquierda hay que pasar por encima de los derechos humanos y cargarse el Estado de Derecho, el futuro se presenta bastante más negro de lo que yo creía.

jueves, 8 de marzo de 2018

¿Por qué no haré huelga el 8 de Marzo?


Pues no. No voy a secundar la famosa huelga feminista. La razón principal es de cajón: soy procurador de los tribunales. Además de ser autónoma trabajo en Justicia, y resulta que a efectos judiciales el día 8 de Marzo, jueves, es hábil. Eso significa que habrá notificaciones, que los plazos seguirán corriendo y que los juicios se seguirán celebrando. Y yo, evidentemente, no puedo negarme a asistir a una vista o dejar pasar un plazo porque estaría perjudicando seriamente los intereses de mis clientes -de hecho, podrían perder el pleito por mi culpa- y eso podría acarrearme una demanda por responsabilidad civil, una sanción del Colegio de Procuradores (cuya presidenta, por cierto, es una mujer) y un absoluto descrédito como profesional. Eso dejando aparte el pequeño detalle de que si no trabajo no como.

En segundo lugar, debo confesar que esta huelga me desconcierta. Como casi todo el mundo sabe, la huelga es una interrupción colectiva de la actividad laboral, de común acuerdo por parte de los trabajadores, como medio de presión para exigir que un conjunto de peticiones sea atendido por el patrón. Es decir, los trabajadores hacen huelga para conseguir que el empresario se avenga a aceptar unas demandas que ellos consideran justas. Por ejemplo: aumento de sueldo, readmisión de un trabajador injustamente despedido, más vacaciones, que se respete el convenio colectivo, etc.
La cuestión es: ¿qué se pretende conseguir con la huelga feminista? No se está exigiendo nada concreto a ningún patrón. No se persigue ninguna mejora laboral. El motivo de la huelga, según dicen, es dar visibilidad a la mujer porque si paran ellas se para todo. Pero resulta que no es así. No es así porque existen los servicios mínimos, y existen los compañeros varones (excluidos de la huelga) que tendrán que hacer su trabajo y el de ellas y precisamente por eso nadie notará nada. Bueno, sí, los pobres desgraciados a los que les toque hacer turno doble. ¿Y qué? ¿Acaso no saben ellos ya que si las compañeras no van a trabajar a ellos les tocará dar el doble de chapa? A todo esto se suma el hecho de que los empresarios se van a ver perjudicados a causa de unas reivindicaciones con las que ellos no tienen nada que ver. Es más, podría provocar un efecto rebote: "Ah, ¿sí? Pues la próxima vez contrataré hombres, que ellos no me van a hacer huelga cada 8 de Marzo". Eso contando con que los empresarios en cuestión sean hombres, porque, ¿también hay que hacer huelga si quien dirige la empresa es una mujer?

¡No, pero es que también es una huelga de cuidados en la familia! No fastidies. ¿Ahora resulta que si tengo hijos o mayores a mi cargo y mi marido tiene que ir a trabajar (recordemos que al ser hombre no puede secundar la huelga) yo no debo darles de comer ni ocuparme de ellos? Y aunque mi marido esté en casa y pueda hacerse cargo, ¿si mi hija me pide por favor que la acompañe al parque, la ayude a hacer pipí o la coja en bracitos, tengo que decirle "déjame en paz, niña, que hoy hago huelga de ti"? Venga, vamos, no me jodas.

¡También es una huelga de consumo!, me rebatirán algunas. Vale, bien, mañana no voy a comprar. Lo que tenga que comprar lo compro hoy, o lo compraré pasado. ¿Le va a suponer alguna diferencia en caja al comerciante a final de semana? No. Ninguna. No lo van a notar. Porque los 20 euros que no me gaste el día 8 me los gastaré el día 9 (día en el que, en circunstancias normales, no me habría gastado nada porque las compras ya las habría hecho el día 8). ¿Resultado de la "huelga"? Nulo.


Pero hay un motivo más. Un motivo al margen de mis circunstancias laborales y de mis consideraciones personales. Y es que, tras leer el manifiesto oficial, no secundaría esta huelga por nada del mundo.
¿Motivos? Pues, para empezar, que una reivindicación feminista debería ser eso, feminista. Nada más (¡y nada menos!). El feminismo es un movimiento que lucha por la igualdad de derechos, libertades y dignidad del hombre y la mujer. Por supuesto, en este sentido me declaro feminista rotundamente y sin fisuras; de hecho, considero que nadie en su sano juicio cuestiona hoy en día que las mujeres debemos tener los mismos derechos, libertades y dignidad humana que cualquier hombre, al menos en Occidente (si hablamos de Arabia Saudí, Irán o hierbas similares, será otra cuestión). Pero es que la huelga convocada para el 8 de Marzo no es sólo feminista. Si leemos el manifiesto (me juego el brazo derecho a que muchas de las que han decidido secundarla ni siquiera lo han leído) veremos que sus autoras han añadido una enorma cantidad de reivindicaciones que no tienen nada que ver con el feminismo. Pero no me creáis sólo a mí, repasemos el propio manifiesto:

-"Denunciamos la LGTBIfobia social, institucional y laboral que sufrimos muchas de nosotras, como otra forma de violencia machista": Aquí tenemos la primera morcilla en el texto. Ojo, que nadie me malintreprete, la lucha por los derechos del colectivo LGTB+ me parece dignísima y necesaria, pero no tiene nada que ver con el feminismo. Entre los LGTB+ hay tanto mujeres como hombres, y cualquier discriminación que sufran estas personas no es machista, sino homofóbica (o transfóbica, o como queramos llamarlo). Es decir, se trata de discriminación por sexualidad, no por género.

-"El trabajo doméstico y de cuidados que hacemos las mujeres es imprescindible para el sostenimiento de la vida. Que mayoritariamente sea gratuito o esté devaluado es una trampa en el desarrollo del capitalismo": Aquí oímos por primera vez la palabra "capitalismo", y desde luego no será la última. Otra morcilla de proporciones estratosféricas. De acuerdo, el trabajo doméstico y de cuidados de las mujeres es imprescindible, eso es cierto, pero, ¿a santo de qué es una trampa del capitalismo? ¿Qué pinta el capitalismo en todo esto? ¿Qué pasa, que el trabajo de las amas de casa y cuidadoras no es gratuito ni está devaluado en los países socialistas y comunistas? ¿Y en los fascistas, en las monarquías absolutas, en las antiguas sociedades feudales? Por favor, que alguien me nombre un sólo país donde el trabajo doméstico haya sido remunerado y prestigioso. ¿China? ¿URSS? ¿Cuba? ¿Corea del Norte? ¿Hungría? ¿Checoslovaquia? ¿Venezuela?
Uy, ¿qué es eso? ¿El canto de los grillos?

-"Llamamos a la rebeldía y a la lucha ante la alianza entre el patriarcado y el capitalismo que nos quiere dóciles, sumisas y calladas": Segunda vez que se menciona el capitalismo como si fuera el único régimen que sustenta el machismo. De hecho, es al contrario: los países capitalistas fueron precisamente los que vieron aparecer los primeros movimientos sufragistas y feministas, y donde las mujeres han tenido (y tienen) más derechos y libertades. Por dar un ejemplo: Nueva Zelanda, Australia, Finlandia, Noruega y Dinamarca fueron los primeros países en aprobar el sufragio femenino. En Rusia se aprobó en 1918, el mismo año que en Irlanda, Luxemburgo, Reino Unido o Polonia (por aquel entonces una república independiente en guerra abierta contra el bolchevismo).

-"Los que logramos acceder están marcados por la temporalidad, la incertidumbre, los bajos salarios y las jornadas parciales no deseadas": Claro, no como los hombres, que tienen todos contratos fijos, estables, con unos salarios por las nubes y las jornadas que les da la gana, ¿verdad? Por cierto, no sé qué dirán las demás, pero yo por mi trabajo cobro exactamente lo mismo que un procurador de sexo masculino. De hecho, los salarios de las empresas se fijan por convenio colectivo, así que me encantaría que alguien me hablase de un sólo convenio colectivo que establezca que las mujeres cobren menos que los hombres por el mismo trabajo.

-"Gritamos bien fuerte contra el neoliberalismo salvaje que se impone como pensamiento único a nivel mundial y que destroza nuestro planeta y nuestras vidas. Las mujeres tenemos un papel primordial en la lucha contra del cambio climático y en la preservación de la biodiversidad": Y otras dos morcillas más, esta vez juntas en el mismo bocadillo. Por un lado, gritamos contra el neoliberalismo, y por otro lado, a favor del ecologismo. Maravilloso, de veras. Un hurra por la lucha anti-neoliberalista y ecologista. Ahora bien, ¿qué diantre tiene que ver todo eso con el feminismo? Si soy dueña de una gran empresa, ¿no puedo ser feminista? Si como carne, llevo pieles, no separo la basura en distintas bolsas, cojo el coche hasta para ir a comprar el pan y voy a los toros, ¿no puedo ser feminista?

-"Apoyamos el trabajo de muchas compañeras que ponen en riesgo su vida por defender el territorio y sus cultivos": Ojo, pero a los tíos no. A ellos no les hace falta. Si un magnate de Monsanto o un capo de la droga llega a la plantación de unos pobres indígenas y descubre que todos ellos son hombres, les da una varonil palmada en la espalda, los invita a un whisky con soda y los deja felices y contentos para que sigan cultivando mientras se va en busca de las plantaciones gestionadas por mujeres para obligarlas a cultivar maíz transgénico o coca.

-"Exigimos también la despatologización de nuestras vidas, nuestras emociones, nuestras circunstancias: la medicalización responde a intereses de grandes empresas, no a nuestra salud. ¡Basta de considerar nuestros procesos de vida como enfermedades!": Esta parte me desconcierta. ¿Qué quieren decir exactamente? ¿Son funcionarias del Ministerio del Tiempo que piensan que los psiquiatras aún diagnosticas vibradores para curar la histeria? ¿O pretenden decir que las mujeres nunca se ponen enfermas, ni física ni mentalmente?

-"Exigimos la despenalización total del aborto, incluyendo a las menores de edad, así como su legalización y cobertura gratuita en el sistema de la sanidad pública. Repudiamos cualquier tipo de injerencia en la decisión de las mujeres sobre nuestros cuerpos. ¡Nosotras parimos, nosotras decidimos!": ¿Ah, sí? Pues yo no. Yo soy feminista y estoy a favor de la vida. Yo soy feminista y creo que el ser humano es humano desde el mismo momento de la concepción. Yo soy feminista y creo que nadie tiene derecho a decidir sobre la vida o la muerte de otra persona, a menos que medien circunstancias excepcionales y de extrema gravedad (léase, los tres antiguos supuestos legales para abortar en España). Yo soy feminista y me preocupa el aborto selectivo de niñas en China, India, y Oriente Medio, que se ha disparado incluso en Occidente por parte de los inmigrantes que dejan atrás su país pero no sus prejuicios. Yo soy feminista y me preocupa que se apoye un feminicidio silencioso y sistemático por el que millones de niñas están condenadas a morir antes de nacer por el único motivo de pertenecer al sexo femenino.

-"Exigimos nuestro derecho a una educación pública, laica y feminista": Lo de feminista de acuerdo. Todo lo demás, una gilipuertez. En primer lugar porque el derecho a la educación pública y laica ya existe y es efectivo. En segundo lugar, porque las mujeres que quieren una educación privada, concertada y/o religiosa para sus hijos no son menos feministas que las otras. La reivindicación de la educación laica y pública no tiene absolutamente nada que ver con el feminismo.

-"Exigimos el mantenimiento y la ampliación de los programas de becas de estudio para las estudiantes de todos los niveles educativos": ¿Me he perdido? ¿En qué centro, ámbito o nivel educativo español le están negando las becas a las mujeres por el mero hecho de ser mujeres?

-"Decimos ¡BASTA! al racismo y la exclusión. Gritamos bien alto: ¡No a las guerras y a la fabricación de material bélico! Las guerras son producto y extensión del patriarcado y del capitalismo para el control de los territorios y de las personas. La consecuencia directa de las guerras son millares de mujeres refugiadas por todo el mundo, mujeres que estamos siendo victimizadas, olvidadas y violentadas. Exigimos la acogida de todas las personas migradas, sea por el motivo que sea": Y vuelta la burra al río. Aquí es donde la cosa empieza a salirse de madre: no sólo tenemos una serie de reivindicaciones pacifistas, anti-racistas y refugees-welcome, que sí, son muy nobles y muy necesarias, pero no tienen nada que ver con el feminismo, sino que nos encontramos con la inmensa burrada, fruto de la más absoluta ignorancia y demagogia, de que las guerras son producto del patriarcado y el capitalismo. ¡Tócate las narices! Ahora resulta que la guerra es cosa de hombres, que si las mujeres mandaran no existiría la guerra, porque, claro, las mujeres somos seres dulces y pacíficos que aborrecemos la violencia. ¿¿Se puede hacer una afirmación más jodidamente machista que esa?? ¿¿Y las mujeres guerreras que han existido a lo largo de la Historia?? Sí, señoras y señores, de la Historia, con mayúsculas, de la cual es conveniente recordar que el capitalismo tal y como lo entendemos no nació hasta el siglo XVIII, con las teorías de Adam Smith. ¿Acaso antes de que naciera el señor Smith no habían guerras? ¿No las había en los reinos feudales, en los imperios de la antigüedad, en la prehistoria? ¿No hubo violencia armada en los países comunistas? Que se lo cuenten a los 82 millones de muertos de la China comunista, a los 21 millones de la URSS, a los casi 5 millones de Corea del Norte, a los 4 millones de Vietnam, a los 3 de Camboya... y no sigo, que podría seguir.

-"Denunciamos los recortes presupuestarios en los sectores que más afectan a las mujeres: el sistema de salud, los servicios sociales y la educación": Ah, los recortes, tema feminista donde los haya. Porque, claro, los recortes no afectan a los hombres. Además los hombres no se ponen enfermos, no necesitan servicios sociales y tampoco necesitan educarse. Eso es sólo para nosotras las féminas.

-"Denunciamos la corrupción como un agravante de la crisis": Completamente de acuerdo. Al 100%. Pero creía que aquí estábamos hablando de feminismo, no de la corrupción ni de la crisis.

-"Denunciamos la grave represión y recorte de derechos que estamos sufriendo": Supongo que se refieren a las mujeres de África, Oriente Medio y la India. Esas a las que se les obliga a matrimonios concertados, a menudo siendo menores de edad, se les impide trabajar, conducir, abrir una cuenta corriente, caminar por la calle con la cabeza descubierta, aparecer en público sin un acompañante varón de su familia, se las somete a mutilación genital, a lapidación en caso de adulterio y a matrimonio con su violador en caso de ser violadas (eso si son solteras, porque si están casadas las lapidan por adúlteras). Esas a las que el manifiesto no hace ni una puta referencia. Supongo que se refieren a ellas, porque lo cierto es que en España y en Europa ni se reprime a las mujeres ni se recortan sus derechos.

-"Denunciamos la justicia patriarcal que no nos considera sujetas de pleno derecho": Esta la he dejado para el final, porque se trata de una calumnia que me toca especialmente la moral. A no ser que se refieran a la ley Sharia (de aplicación en algunos países musulmanes, a los que se cuidan muy mucho de mencionar), lo que dice esta frase es una total y absoluta mentira. En España la Justicia NO es patriarcal, y desde luego, POR SUPUESTO que considera a las mujeres SUJETOS de pleno derecho. Pongo en mayúsculas lo de "sujetos" porque resulta que la palabra "sujetas" no es un sustantivo, sino un adjetivo, y convertirla en un supuesto femenino inventado de "sujetos" es una patada al lenguaje que me provoca vergüenza ajena. Soy licenciada en Derecho, soy jurista, y desafío a cualquiera que me lea a que me cite UNA SOLA LEY española o europea que beneficie al hombre en detrimento de la mujer o que no considere a las mujeres sujetos de pleno derecho.

-Corolario especial para Cataluña, que aparece sólo en el manifiesto especial para esa comunidad: "Denunciamos la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española y exigimos su inmediata supresión": Ah, vale, ahora resulta que si haces huelga y te manifiestas el 8 de Marzo en Cataluña estás comprando el independentismo dentro del pack. CON DOS OVARIOS ASI DE GORDOS. Las mujeres constitucionalistas catalanas se tienen que JODER porque el manifiesto FEMINISTA incluye reivindicaciones INDEPENDENTISTAS porque sí, POR LA PUTA CARA. Le pediría a Anna Gabriel que viniera a explicarme qué coño tienen que ver el feminismo y el independentismo catalán, pero dado que está fugada en Suiza huyendo de la justicia (patriarcal, por supuesto), lo mismo le pilla un poco lejos.


Por último, a todas las mujeres que han elaborado este manifiesto y a todas aquellas que lo apoyan o piensan apoyarlo, permítanme darles un consejo, de feminista a feminista: un movimiento sólo puede prosperar si sus integrantes están unidos. Si dejan de lado sus diferencias para luchar por un objetivo común. La política, la religión, el nacionalismo regionalista, el ecologismo, el aborto, la prostitución... son temas que pueden tocar el feminismo pero que no forman parte intregral de él, y que, por consiguiente, pueden dividirnos. Una mujer atea, vegana, de izquierdas, independentista y abortista puede estar a favor de la igualdad de hombres y mujeres del mismo modo que una mujer creyente, omnívora, capitalista, españolista y pro vida. Si reivindicamos sólo lo básico, ambas mujeres se entienden, dejan de lado sus diferencias y luchan juntas. Pero si nos podemos a reivindicar lo de alrededor, las diferencias las van a separar. Por lo tanto, es un error muy grave añadir a un manifiesto feminista una serie de reivindicaciones con las que muchas mujeres no van a coincidir, porque destruye por completo la sororidad femenina, y es un acto de demagogia, oportunismo e hipocresía brutal pretender que quienes quieren luchar en favor del feminismo tengan que comprar por narices todo el puñetero pack.
Me uniré a las reivindicaciones del 8 de Marzo cuando se centren en lo básico, en lo fundamental y en lo que a todas las mujeres nos une, en vez de en lo que nos separa.