martes, 30 de agosto de 2022

Crítica de "La Casa del Dragón": segundo capítulo, primera temporada

¡Bienvenidos, niños del verano! Ya tenemos aquí el segundo capítulo. La primera sorpresa es que TENEMOS UNA INTRO (que nunca entenderé por qué no sacaron ya al principio del capítulo anterior). La música es exactamente la misma que la de la intro de Juego de Tronos, pero la imagen, en lugar de localizaciones desplegándose como construcciones steampunk, son ríos de sangre corriendo por las calles. Sí señor, toda una declaración de intenciones: Khorne approves y los vampiros también. Habría hecho falta la intro al principio del primer capítulo, así todos hubiéramos estado mucho más advertidos de lo que íbamos a ver.

Para no perder la costumbre, la primera escena es un cadáver. Dado que el cadáver en cuestión está siendo devorado por los cangrejos, quienes hemos leído Fuego y Sangre ya sabemos que la escena está teniendo lugar en los Peldaños de Piedra y los cadáveres pertenecen a los piratas empalados por el príncipe almirante myriense Craghas Dahar, que efectivamente los dejaba a merced de los cangrejos hasta que se ahogaban al subir la marea. Claro, los lectores de los libros vemos esta escena y automáticamente la ponemos en contexto, pero imagino que para los no lectores semejante comienzo de capítulo habrá sido bastante WTF.


Si los nobles myrienses son así, ¿cómo serán los plebeyos?


Luego resulta que no, que aparece Black!Corlys en el Consejo Real y se queja de que un pirata está atacando barcos Ponienti en los Peladaños de Piedra y que uno de ellos era suyo. A ver, el conflicto real entre Craghas Dahar y los reinos de Poniente no es porque Craghas sea un pirata que empale vivos a los marineros; Craghas es un noble de Myr que hacía eso con los verdaderos piratas. Lo que pasó es que empezó a cobrar impuestos de navegación a todos los barcos que pasaban por la zona y con el tiempo los hizo tan abusivos que a los comerciantes de Poniente se les hincharon los cojones. Pero claro, en una serie cuya intro consiste en ríos de sangre corriendo por las calles me imagino que un cobrador de impuestos no era lo bastante gore. Rhaenyra dice que por qué no envían dragones a quemar a los piratas, lo cual francamente me parece una muy buena idea, pero el rey Viserys y su Consejo le responden que no, que no piensan declarar la guerra a las Ciudades Libres, y a Rhaenyra le dicen que las niñas estás más guapas calladitas y que le dejan escoger a su gusto a un nuevo Guardia Real para que no patalee. A ver, en esta serie se están haciendo la picha un lío; esta respuesta del rey tenía sentido en los libros, cuando era el príncipe almirante el que recaudaba impuestos de paso en nombre de Myr, Lys y Tyrosh (una alianza de tres Ciudades Libres conocida en aquellos tiempos como la Triarquía). Al cambiar las cosas y hacer que todavía estén por allí los piratas, la serie le da toda la razón a Corlys Velaryon y a Rhaneyra, puesto que matar a los piratas nunca sería una casus belli contra la Triarquía. Ya se va notando el rollito woke de "el negro y la chica son los únicos que tienen razón pero los malvados hombres blancos no quieren escucharlos porque son unos opresores racistas heteropatriarcales".

Llega el momento de la elección del Guardia Real, que es curiosa porque par a elegirlo han puesto en un tablero figurillas con las esfinges de los símbolos heráldicos de las Casas a las que pertenecen los candidatos. Me pregunto yo: ¿esas figurillas las tallan para la ocasión, o en la Fortaleza Roja tienen diez armarios llenos hasta los topes de las tropecientas mil figurillas heráldicas de todas y cada una de las Casas de la alta y la baja nobleza ponienti, por si acaso alguno de sus miembros llegase alguna vez a ser candidato? Es más, ¿para qué garbanzos hacen falta realmente esas figurillas?
Sea como sea, a Rahenyra le ofrecen varios caballeros candidatos, y ella acaba escogiendo al único que tiene experiencia en combate, y que por supuesto resulta ser (¡qué sorpresa! ¡no nos lo imaginábamos!) ser Criston Cole. El actor que lo interpreta es guapísimo y un acierto de casting, ojalá hubieran escogido a otro tan buemozo para hacer de Daemon. Rhaenyra empieza ya a hacerle ojitos, ignorando que acaba de meterse ella sola en un lío de proporciones épicas. En el libro, cuando ser Criston es escogido como nuevo miembro de la Guardia Real ya lleva un tiempo siendo el Escudo Juramentado de Rhaenyra, pero en esto la serie se aparta nuevamente del canon, ya que Rhaenyra no parece conocerlo de nada.

Mientras tanto, el rey Viserys le enseña a lady Alicent su maqueta gigante de Valyria, contando detalles ciertamente interesantes, como que los valyrios extraían de los volcanes el poder místico para practicar la magia de sangre. Cuando Viserys y Alicent están trasteando con un dragón, la figura les resbala de las manos, sea cae al suelo y se rompe, lo que NO ES UN VATICINIO FUNESTO EN ABSOLUTO, QUÉ VA. La escena los deja claro que Rhaneyra no sabe nada de las charlas de su padre con su amiga Alicent, porque ésta se las está ocultando. No es que sea sospechoso ni nada de eso.
Como si no tuviéramos bastantes vaticinios funestos, después de esta escena vemos a Rhaenyra y a Alicent rezando juntas en un sept (que no puede ser el Gran Sept de Baelor, dado que este rey todavía no ha nacido), recordando a sus respectivas madres frente al altar de Desconocido. En los libros se deja bastante claro que el Desconocido era el dios menos popular de todos y el que menos velas tenía en su altar, porque rezarle estaba considerado de mal agüero, pero en este sept su altar está lleno de velas (nueva prueba de que aquí adoras a Khorne) y las dos muchachas le rezan tan tranquilas.


"Vamos a invocar al Desconocido. ¿Qué podría salir mal?"


Después de esto, Black!Corlys se reúne con el rey Viserys y le dice que Daemon ha "reclamado" Rocadragón sin oposición (no, Daemon no ha reclamado nada, Daemon es un Targaryen y a no ser que tenga la prohibición expresa del rey puede ir a Rocadragón cuando le plazca porque es un feudo Targaryen), y que los piratas en los Peldaños de Piedra son una amenaza directa contra Poniente, que seguramente las Ciudades Libres querrán atacar Desembarco del Rey después de eso (!?). A continuación, le pide que se case con su hija Laena porque así las Casas Targaryen y Velaryon se unirán (!!!). Pero alma de cántaro, ¡si ya están unidas! ¡Si los Velaryon y los Targaryen llevan casándose entre ellos desde que llegaron a Poniente (obviando el pequeño detalle de que las dos familias son blancas, por eso hasta ahora, amable espectador, no había sospechado usted tan cosa)! ¡¡Si el propio Corlys está casado con Rhaenys Targaryen!!

Hasta ahora, el capítulo me está gustando, a pesar de las diferencias con el libro: buenas localizaciones, buenos diálogos, desarrollo de los personajes... pero de repente los guionistas deciden que sí, que vale, que muy bonico todo, pero que no es posible rodar un capítulo sin escenas desagradables de gore, muerte o sangre porque en tal caso los despide la productora. Así que nos deleitan con una herida purulenta y gangrenada del dedo de Viserys (¿se va a convertir en una costumbre recurrente lo de mostrarnos a este hombre con llagas purulentas, o ke hase?), y aunque George R.R. Martin nos cuenta que en estos casos los maestres consideran que la estrategia más efectiva es cortar el dedo y limpiar la herida con vino hirviendo, aquí nos muestran una técnica médica todavía más puntera que consiste en meter el dedo en una olla llena de gusanos vivos para que se coman la carne palpitante del paciente. Por cierto, el rey Viserys mete la mano entre los gusanos y al parecer ni se inmuta, como si le estuviesen haciendo la manicura. ¡Confirmado, en Poniente no sólo adoran ya a Khorne, también han aparecido cultistas de Nurgle! Me pregunto cuánto tardarán en aparecer los paladines de Slaanesh y de Tzeencht; en cuanto lo hagan, ya podremos consagrar Poniente al Caos Absoluto.


El Abuelo Nurgle, muy feliz con los métodos de los Maestres de la Ciudadela


En medio de la gusi-fiesta, Viserys le pregunta a Otto Hightower que qué le parece eso de casarse con Laena Velaryon. La Mano le responde que Laena es un poco cría, que igual en vez de un anillo de desposada tendría que ponerle un chupete. Y se entiende, hombre; luego te enseñan a la cría y el pelucón que lleva abulta más que ella. Como mucho tendrá doce años.

Mientras la pobre Laena intenta convencer al rey de que se case con ella aunque eso lo convierta en Pedobear, Rahenys tiene la siguiente conversación con Rahenyra:

"Nena, no te quiero asustar, pero acabo de leer Fuego y Sangre y en el libro dice que si tu padre se casa tendrá un heredero varón, los nobles querrán coronarlo a su muerte en vez de a ti, y te echarán a patadas del trono".

"No pasa nada, tía, en cuanto sea reina crearé un nuevo orden".

"Tampoco te quiero asustar, pero también he visto la serie completa de Juego de Tronos y no quieras que te cuente cómo terminó la última princesa Targaryen que dijo eso".

Evidentemente, Rhaneyra no hace ningún caso a Rhaenys; si se lo hiciera, ya no tendríamos serie (sería como si Eddard Stark se negara a ser la Mano del Rey al principio de Juego de Tronos). Pero no deja de llamarme la atención que nuevamente regrese el discurso woke de "los hombres no te dejarán reinar porque eres mujer", cuando ha sido precisamente un hombre -Viserys- quien la ha nombrado heredera al trono, y será precisamente una mujer -no diremos quién para no hacer spolier a los no lectores- quien montará una conspiración para impedírselo.


"Soy la única que ha leído Fuego y Sangre, bitches".


Tras esta conversación, volvemos con el rey Viserys, que recibe la noticia del Consejo Real de que Daemon, que sigue considerándose heredero del Trono, se va a casar con Mysaria, la prostituta. Aquí la serie realmente está dejando a Daemon Targaryen mucho peor de lo que es en los libros: aunque le fastidió que no lo nombrasen heredero, nunca se rebeló contra el nombramiento de Rhaenyra, y aunque es cierto que dejó embarazada a Mysaria y quiso regalarle a su bastardo un huevo de dragón, nunca tuvo intención de casarse con ella (de hecho, si se hubiera casado con ella habría perdido toda opción de subir al trono; recordemos que el futuro príncipe Duncan Targaryen, el que se enamoró de la plebeya Jenny de Piedrasviejas, tuvo que renunciar a su futuro trono para poder casarse con ella). ¿Y eso de que tiene un ejército de capas doradas? ¿WTF? Los capas doradas no son el ejército personal de Daemon, son la guardia de Desembarco del Rey, y no se mueven de allí. En la serie mencionan que el huevo de dragón que tiene Daemon en su poder pertenece a una nidada del dragón Sueñafuego como si fuera algo muy importante, pero lo cierto es que en el libro la procedencia del huevo es irrelevante; ni siquiera se hace mención a ella.

Tras esto viene una escena en Rocadragón que, aunque difiere totalmente del libro (en Fuego y Sangre, Viserys se limita a ordenar a Daemon que devuelva el huevo y regrese con su legítima esposa so pena de ser acusado de traición y éste obedece, aunque de mala gana), me parece muy interesante, porque además de darle protagonismo a Rhaenys (que levante la mano quien no la haya confundido con Daenerys cuando llega a Rocadragón montada en Syrax), pone de relieve algo que está mucho más claro en los libros: que Daemon quiere a Rhaneys y jamás le haría daño. Aunque, claro, nuevamente aquí la serie patina al haberse empeñado en poner a Daemon reclamando la herencia del Trono, porque en los libros él nunca discute el nombramiento de su sobrina precisamente por el afecto que le tiene. Lo único que lamento es que esta escena haya dejado a ser Otto y al rey Viserys como unos estúpidos, puesto que sabiendo que Caraxes está en Rocadragón van allí a pelo, y a la única a la que se le ocurre llevar otro dragón como contraataque es a Rhaenyra. De verdad, no hace falta dejar a los hombres por idiotas para que una mujer sobresalga; podemos sobresalir por nosotras mismas, gracias.


"Pa' huevos de dragón, los míos"


Una conversación entre Mysaria y Daemon revela que Mysaria no sólo no está embarazada (gran cambio respecto al libro) sino que nunca lo estará porque se ha asegurado de no quedarse nunca embarazada. Mi pregunta es: ¿cómo? ¿Existen las histerectomías en Poniente, o las ligaduras de trompas? Qué lástima que la pobre Aemma Arryn, a pesar de ser reina, no tuviera el mismo ginecólogo de Mysaria.

Finalmente, para sorpresa de nadie, después de todo un capítulo especulando con Laena Velaryon, el rey Viserys decide que se va a casar con Alicent Hightower para indignación de Rhaenyra, a la que no le mola mucha la idea de que su amiga del alma se vaya a convertir en su madrastra.


Rhanerya al enterarse de que su BFF va a convertirse en su madrastra


Otro que también se indigna mucho es Blak!Corlys, que nos regala una escena involuntariamente cómica con levantándose airado y diciendo: "¡Yo soy de pura sangre valyria!". Claro, hombre, y Sansa Stark tenía pura sangre de las Islas del Verano. Por supuesto, todos en el Consejo Real pasan de él y lo miran mal porque el Consejo Real está formado por hombres cishetero supremacistas blancos que son de la NRA y votan al Partido Republicano. De verdad, una cosa es reflejar las desavenencias entre la Casa Targaryen y la Casa Velaryon a raíz del matrimonio del rey Viserys, que las hubo, y otra muy diferente que la serie se empeñe en mostrar una y otra vez a lord Colrys como un pobre incomprendido que a pesar de ser el noble más sabio y sensato de Poniente es ignorado por todo el mundo por ser negro. Vamos, que de no ser por la gran flota que posee, el Consejo Real ya lo habría mandado a Astapor cargadito de cadenas. Para colmo, hablando con Daemon Targaryen al final del capítulo da a entender que ha llegado a ser Señor de Marcaderiva por méritos propios, que se lo ha trabajado muy duro, que "levantó su Casa con el sudor de su propia frente"... Y un huevo de pato; Colrys Velaryon es Señor de Marcaderiva y Consejero Naval porque su padre lo fue antes que él, y antes su abuelo, y así hasta que nos remontamos a la Conquista de Aegon, cuando éste nombró a su tío Daemon Velaryon primer Consejero Naval (sí, según esta serie, Aegon y sus hermanas tendrían que haber sido mulatos; de hecho TODOS los Targaryen deberían haber sido mulatos porque los Velaryon y los Targaryen llevan casándose entre ellos desde que llegaron a Poniente. Es más, lady Alyssa Velaryon, tía carnal de Corlys, fue la madre del rey Jaehaerys Targaryen, ese mismo que aparece todo tan blanco en el prólogo del primer capítulo, y que, según la lógica de la serie, debería haber sido mulato).
Al final, él y Daemon pactan las bases de lo que será la guerra de los Peldaños de Piedra, de la que supongo sabremos más en el siguiente capítulo.


LO QUE ME HA GUSTADO:

-Toda la escena de Rocadragón: Rhaenrya, la entrada de Syrax, las localizaciones, la música, los diálogos.

-Cómo la serie se esfuerza en desarrollar la relación entre Alicent y Viserys (una mejora respecto al libro, hay que admitirlo).

-Que en este capítulos (casi) se hayan olvidado del gore gratuito para ir a lo que importa, que es la historia y el desarrollo de los personajes.


LO QUE NO ME ACABA DE CONVENCER:

-Daemon Targaryen. No me gusta cómo lo están reflejando en la serie; parece un niñato caprichoso y mimado que actúa sin pensar en las consecuencias e intenta desesperadamente llamar la atención de su hermanito mayor a base de berrinches. Parece más adolescente que Rhaenyra.


LO QUE NO ME HA GUSTADO:

-La escena de los gusanos. No era necesaria. No lo era. En serio.

-El recurrente subtexto woke.

-Que hayan convertido a Craghas Drahar en un engendro del Caos que no sabe ni dónde tiene el dedo gordo del pie (la Triarquía lo mandó a matar piratas y cobrarle impuestos a los marineros, y él entendió que tenía que cobrar impuestos a los piratas y matar a los marineros. Ni te cuento la que se montó cuando el día de su boda le dijeron que sacrificase a una cabra y desflorase a su mujer).


Lord Corlys cada vez que alguien del Consejo Real ignora sus peticiones

4 comentarios:

Malena dijo...

Muchas gracias. Es como ver la serie esto de leerte, pero sigue sin interesarme. Antes de que publicaras, le pregunté a mi hermano como había estado el segundo cap. Y me respondió “solo intrigas palaciegas”. Y a mi me sorprende que me aburra un episodio de intrigas palaciegas cuando toda la primera temporada de GOT fue eso: que si Meñique, que si Varys, que si el Maestro Pycelles y la investigación de Ned Stark para encontrar al asesino de Jon Arryn. No sé, estos cuentos de amigas que se casan con el padre de una de ellas, suenan a telenovela. No tiene el suspenso de los preparativos para la boda de Daenerys.

Estelwen Ancálimë dijo...

Realmente el rollo telenovelesco es una licencia de la serie. En el libro, cuando Alicent se casa con el rey Viserys a los 18 años, Rhaenerya es una niña de 9, por eso Alicent la llama "hija" y su relación inicial es buena. En la serie, han hecho a Rhaenyra casi diez años mayor de lo que en realidad era, supongo que para poder acelerar los acontecimientos de la trama y meter el arco argumental del "drama adolescente".

Laura Niphredil dijo...

Weeee! Has vuelto! Echaba de menos tus post, ^^

De momento no estoy siguiendo la serie porque no tengo mucho tiempo, pero me tiene intrigada. La parte del gore y la sangre me tira un poco para atrás porque no es algo que me guste mucho, pero la parte de intriga palaciega siempre me ha parecido interesante. No he leído el libro en el que está basada, así que supongo que me perderé muchas cosas si algún día decido verla, pero me conformo con tus posts para ver por dónde va. Como tenemos gustos parecidos, no me pillarán muchas cosas por sorpresa.

Mergandevinasander dijo...

Me alegro que estés de vuelta Estelwen!

Para cuando unas reseñas de "Los anillos de poder"?. Porfi, porfi, porfi... Te recuerdo que tu blog se llama "La luz de Valinor" jejejeje.

Me encantan tus críticas y seguro que podrías sacar bastante jugo a las licencias que se están tomando a costa de Tolkien.

Un saludo!