viernes, 25 de enero de 2013

Buenas noticias


A raíz del revuelo mediático que ha causado la heroica actuación de un policía nacional aquí en España, que salvó la vida en el Metro de Madrid a una mujer que cayó desmayada sobre las vías cuando faltaba poco para la llegada de uno de los trenes, me ha dado por hacerme una pregunta: ¿existe algún diario online, o alguna página web, que sólo dé buenas noticias?

Pues sí, existen, y además hay uno en castellano. Se trata del diario digital "Son Buenas Noticias", cuyo enlace tenéis aquí. Creo que es importante, y más aún en estos tiempos, leer información positiva de vez en cuando, para saber que no sólo pasan desgracias en el mundo y que igual que las personas pueden hacer cosas horribles también son capaces de actos maravillosos. Recomiendo a todo el mundo pasarse por este diario de vez en cuando y entrar en contacto con la otra cara de las noticias, la cara más amable, la que no suele salir en los telediarios ni en los periódicos normales pero también existe.

Así que ya sabéis, gente, la próxima vez que os vengan con eso de que "el hombre es un lobo para el hombre", recordad que también existen lobos como este, y que entre todos, un mundo de lobitos así también es posible ^^


lunes, 21 de enero de 2013

A Rumbelle Story, o cómo poner a Estelwen de los nervios


Antes que nada, DISCLAIMER: Esta entrada tiene spoilers de toda la primera temporada de Once Upon a Time (Erase una vez, en castellano) completita, y de la segunda temporada hasta el capítulo 12.

Y dicho esto, debo decir que estoy tirándome de los pelos. Mordiéndome las uñas. Maldiciendo en arameo. Todo a la vez. Hace algún tiempo hice ya una entrada hablando de la que se ha convertido en una de mis series favoritas, y mi viciada del momento. Y de todas las parejas de cuentos que aparecen en la serie, hay una que me llegó al corazón por encima de todas: la de la Bella y la Bestia, o lo que es lo mismo, Rumpelstinskin y Bella (Rumbelle para los amigos).

La cosa empieza en el capítulo 12 de la primera temporada, el maravilloso Skin Deep. En él, conocemos a Bella, hija de un noble y prometida por conveniencia a un tal Gastón. Su padre está siendo atacado por los ogros, e invoca la ayuda de Rumpelstinksin, que como pago pide a la propia Bella, para llevársela a su castillo como prisionera y criada. Aunque el padre y el prometido se niegan, ella acepta para salvar a su pueblo, y se va con él. La historia es de todos los fans conocida: se enamoran, ella le besa intentando romper su maldición, él la rechaza horrorizado ante la idea de perder su magia y volver a ser débil, y más tarde Regina acaba con toda posibilidad de reconciliación secuestrando a Bella y haciendo creer al pobre Rumpel que su amada  ha muerto, tras ser humillada y castigada por su padre.

La Bella y la Bestia, conociéndose un poco

Tendremos que esperar al último capítulo de la primera temporada, A World Without Magic, para asistir al conmovedor reencuentro entre Bella y el ahora llamado Mr.Gold. El Sombrerero Loco libera a Bella con la esperanza de que Gold decida ayudar a romper la maldición de Regina para que así ella pueda recordar quién era y de quién estaba enamorada. El reencuentro entre los dos, con una Bella confusa y aturdida y un Rumpel asombrado, incrédulo y emocionado hasta las lágrimas al ver ante sí a su amada, a la que creía muerta, es conmovedor. Y su abrazo final, cuando Bella por fin le recuerda al romperse la maldición, es aún más bonito.

 
El feliz reencuentro, ¡al fin!

Los problemas vienen en la segunda temporada. Al parecer, los guionistas han decidido seguir al pie de la letra ese viejo axioma que dice "sin conflicto no hay historia", y dado que Rumbelle es la pareja favorita del público (desbancando incluso a Blancanieves y a su Príncipe Encantado), pues vamos a putear al público, ¿no? Merecido lo tiene por haber ignorado a Snow y a Charming y sus insulsos triángulos amorosos y haber preferido a la bella y a la bestia.
Así que, de entrada, tenemos a una Bella que ha decidido impedir, sea cual sea el precio, que Rumpelstinskin dé su merecido a los que son más malos que él. Esto me parece muy gracioso; los buenos pueden matar a Maléfica, o cargarse a un sinfín de Guardias de Regina o del rey Jorge, y aquí no ha pasado nada; siguen siendo los buenos. Pero va Rumpel a matar a Regina, que en esos momento es la mala de la película, y "ooh, no, Rumpel, por favor, sé bueno y no lo hagas". Y claro, de morritos al final por aquello del dementor (¿o era un nazgûl?).

Después de eso, otros tantos morritos porque hace magia. No sé qué tendrá de malo que Rumpel haga magia, mientras no sea para hacer el mal: a mí lo de convertir la paja en oro y hacer pociones tipo Snape me parece bastante inofensivo; no es lo mismo que, yo que sé, ir por ahí arrancando corazones y convirtiendo a la gente en caracol. Total, que Bella vuelva a cabrearse y se va por ahí a dar una vuelta y a aclararse las ideas. Obviamente, la secuestran. En este caso es su padre, que quiere que se olvide de Rumpel por las buenas o por las malas y decide atarla a una carretilla de las minas para que la lleve fuera de los límites del pueblo y así pierda todos sus recuerdos... aunque eso implique olvidarle a él también. Por fortuna, Mr. Gold acude al rescate justo a tiempo y salva a Bella y a sus recuerdos, algo que ella agradece mandándolo a paseo.
Por fortuna, Rumpel consigue recuperarla sincerándose con ella y contándole los verdaderos motivos por los cuales fomentó la maldición de Regina y trajo la magia a Storybrook: para poder ir en busca de su hijo Bae, que había huido a este mundo porque odiaba la magia, que tanto había cambiado a su padre (esto plantea una interesante cuestión, la de si Bae viajó también en el tiempo aparte de cambiar de dimensión o si fueron los propios personajes víctimas de la maldición los que lo hicieron, porque Baelfire despareció siendo un muchacho y nos consta que Rumpelstinksin tiene en torno a 300 años gracias a la inmortalidad que le otorga su condición de Ser Oscuro, lo cual significa que si los tiempos se correspondieran Bae estaría muerto y enterrado desde hace siglos). Ante la confesión de Rumpel, Bella se ablanda y decide perdonarlo... y proponerle una cita con hamburguesas.

A ver quién es capaz de resistirse cuando Rumpel te confiesa sus debilidades y te mira con esos ojitos...

Después de esto, cuando parece que todo va a ir mejor, los guionistas se dedican a joderle las citas a nuestros muchachos: se van al restaurante de la abuelita a comer hamurguesas y Regina se lleva  Rumpel, preparan un mini-picnic romántico y llegan Emma y sus padres para acusarle alegremente de haber matado a Archie... menos mal que esta segunda vez, por lo menos, Rumpel aprovecha para impresionar y enternecer a su dama con la buena mano que tiene con los animales. El caso, al fin y al cabo, es que nunca puedan estar juntos romantiqueando... y no digamos una escena de cama, que esta es una serie para todos los públicos (aunque los Charming bien que se lo montan, con pillada incluida).

Burger-cita de Rumbelle, poco antes de ser arruinada por Regina

Para terminar de arreglar las cosas, el capitán Garfio y Cora llegan a Storybrook. Como Garfio anda resentidillo con Rumpel por aquello de haberle arrancado el corazón a Milah (aprovecho para decir que Milah me parece una mentirosa, una zorra, una irresponsable, una mala madre y una sinvergüenza, que me cae como el culo, y que la muerte que tuvo era mucho mejor de la que se merecía), decide que va a pagarlo con la misma moneda y va a por Bella. El capítulo, que es el undécimo de la segunda temporada (The Outsider) va bastante bien; a todos nos gustó ver a Bella en apuros y a Mr. Gold yendo presto a salvarla. Lo malo es el final. Cuando Rumpel por fin ha encontrado un hechizo que le permite conservar la memoria a pesar de salir de Storybrook e ir a buscar a su hijo, Garfio aparece, le pega un tiro a Bella, y la hace cruzar la línea, despojándola de todos sus recuerdos. Esta escena es muy cabreante primero porque no sé a quién cojones se le ocurre despedirse al borde de la línea, y en segundo lugar porque Garfio ya tendría que estar muerto de no ser porque a Bella le dio de nuevo la perra de "oh, Rumpel, no lo mates, sé una buena persona". ¡Joder, que es el capitán Garfio! ¡Que no va a descansar hasta veros muertos! ¡Que es el mismo tipo que quería matar a Campanilla, a Wendy, a Peter Pan y a todos esos niños simpáticos! Pues no, hay que dejarlo vivir por huevos. Y mira lo que pasa.

La maldita culpable de todo, con su cara de asco habitual. Es una zorra, ella lo sabe, y sabe que nosotros lo sabemos.

Y lo peor, lo definitivamente peor, es el capítulo 12. Maléfica ironía que tenga el mismo número que tenía Skin Deep en la primera temporada: uno crea la pareja, el otro la destruye. Porque ahora resulta que:

a) Bella se ha convertido en una amnésica histérica y descontrolada que no atiende a razones. Lo siento, pero me parece poco creíble. Primero, porque Bella conoció a Mr.Gold antes de recobrar la memoria, con lo cual debería guardar recuerdos de él aunque no recuerde que era Bella. Y en segundo lugar, joder, si yo estoy amnésica y confundida en medio de una carretera a la que no sé cómo he llegado, me fiaré del único familiar o amigo que me reclama, no lo mandaré a la mierda como si fuera el demonio en persona.

b) ¿Nadie es capaz de apoyar al pobre Mr. Gold y explicarle a Bella que él es su prometido y que no le va a hacer daño?

c) La taza desportillada  Eso me mató. Por completo. Malditos sean los guionistas. ¿De verdad tenían que poner a Bella como una histérica descontrolada rompiendo la puta taza? ¿¿POR QUÉ TENÍAN QUE ROMPER LA PUTA TAZA, EN EL NOMBRE DE CRISTO?? ¿Para simbolizar la ruptura de la relación? ¡PUES SE PODÍAN HABER METIDO EL SIMBOLISMO POR EL CULO!

d) ¿Rumpel dándose un beso con Cora? WHAT THE FUCK?? Ahora resulta que fueron amantes, pues vale, pero, ¿por qué coño lo del beso? ¿Estamos gilipollas, o simplemente tontos? Si había que mostrar que fueron amantes, habrían podido ser más sutiles, joder. ¡Se supone que Rumpel sigue enamorado de Bella y esas cosas!

e) Hablando de besos, si se supone que un beso de amor rompe cualquier maldición, ¿por qué el beso que Rumpel le da a Bella no funciona? ¿Será porque ella ya no le ama al haber perdido la memoria? ¿O será sencillamente porque los besos de amor sólo rompen las maldiciones que a los guionistas les salen del nardo?

Un disparo, un tropezón, y a la mierda la mejor pareja de la serie en dos cómodos pasos

En definitiva, una MIERDA mayúscula. A fuerza de querer meterle conflictos a esa pareja, la están destrozando. ¿Y por qué lo están haciendo? Pus por lo que he comentado antes, supongo, para joder a los fans y porque sin conflicto no hay historia. Y lo peor es que ni uno solo de los buenos, ni uno solo, parece sentir la más mínima compasión o comprensión por Rumpelstinskin. Otra cosa que no entiendo: Regina ha sido una cabrona y ha tratado mal a todo el mundo, pero como quiere redimirse por Henry Emma y Blanca la perdonan. ¿Y qué pasa con Rumpel? ¿Es que él no tiene derecho a una segunda oportunidad, a que la gente lo apoye un poco? ¿Y Bella? ¡Ella no es mala! ¿Por qué la gente se niega a ayudarlos, por qué a nadie parece importarle lo que ha sucedido? Un asco, la verdad. Ya veremos cómo arreglan este desaguisado los guionistas, porque como no lo arreglen, me voy a cabrear. Mucho.

Y por cierto, SIGO SIN ENTENDER POR QUÉ TENÍAN QUE ROMPER LA PUTA TAZA.

domingo, 20 de enero de 2013

¿Santos o pecadores?


Hay muchas figuras del cristianismo que son considerados santos. Ojo, digo del cristianismo porque hay algunas figuras del protestantismo y del anglicanismo que, aunque no son considerados santos al estilo católico u ortodoxo, sí que han sido elevados a los altares como una suerte de ejemplo e inspiración a seguir.
Y de todos estos santos, de todos estos inspiradores, hay unos cuántos que, válgame Dios, a poco que se conoce un poco sobre su vida y sus actos, una no puede dejar de preguntarse cómo es posible que semejantes individuos pudieran ser considerados santos.

Antes de nada,. supongo que tendré que dejar claro lo que yo considero (y se considera en general) que es un santo. Un santo no se convierte en tal porque haya sido muy docto, muy poderoso, muy influyente o muy conocido, o porque le dé la gana a la Iglesia cristiana de turno que no canonice. Un santo (definición de la Delegación Episcopal para las causas de los santos) es "aquel cristiano que ha imitado a Nuestro Señor Jesucristo a través de una vida que se caracteriza por el cumplimiento en su vida del amor a Dios, que se concreta en la práctica de las virtudes o del acto supremo del martirio".
Lo cual viene a decir que hay dos formas de alcanzar la santidad: vivir imitando el ejemplo de Cristo, o morir por la fe cristiana. Sobre lo del martirio, poco más que añadir, aunque personalmente no estoy de acuerdo en eso de atribuir la santidad por el simple hecho del martirio (en todo caso, ser un mártir de la fe te concedería la salvación, el Cielo inmediato, pero no la santidad). Pero, ¿qué pasa con los que no murieron mártires? Se supone que deberían haber alcanzado la santidad por haber imitado a Jesucristo durante sus vidas. ¿Y qué significa imitar a Cristo? Yo creo que eso poca discusión tiene; los valores básicos que nos enseñó Jesús fue el amor a los enemigos, la paz, el perdón, la caridad, la misericordia, la humildad...

Pues bien, hay una serie de santos, venerados por distintas Iglesias cristianas (no me refiero sólo a la católica) de los que se podría decir que estas virtudes escaseaban, cuando no brillaban por su ausencia. Y no estamos hablando de pecadores que luego se arrepintieran (tipo Saulo de Tarso o San Juan de la Cruz), sino de personas que, aún siendo santos, demostraron ser crueles, vengativas, misóginas, prejuiciosas o egoístas. ¿Ejemplos? Seguro que me dejo muchos, pero he aquí unos cuántos:

-San Pedro Damián:

Cardenal católico del siglo XI, muy amiguito del Papa Gregorio VII (supongo que eso sienta ya un precedente, ya que este Papa fue el que tuvo la brillante idea de decretar el celibato obligatorio de todos los sacerdotes y anular por las buenas todos los matrimonios de los que ya estaban casados, pasándose un poco por el forro la indisolubilidad del matrimonio y destrozando miles de familias en el proceso). Este hombre de misericordioso tenía más bien poco, a juzgar por los durísimos juicios de valor a los que sometía a los demás, llegando a alegrarse de las desgracias ajenas cuando el ajeno en cuestión no era de su gusto. Como muestra, la malsana satisfacción que destilaban sus palabras al comentar la muerte de la princesa bizantina María Argyra a causa de la peste, enfermedad que también se llevó a su esposo, hijo del Dogo de Venecia, y al único hijo de ambos. Según Pedro Damián, el trágico destino de la princesa era un merecidísimo castigo por sus horribles pecados... consistentes en ser una mujer limpia y aseada. He aquí sus palabras:

(La princesa) se negaba incluso a lavarse con agua normal, y obligaba a sus sirvientes a recoger el rocío que caía el cielo para bañarse en él. Tampoco se dignaba a tocar los alimentos con las manos, sino que ordenaba a sus eunucos que se los cortaran en pequeño trozos que luego ensartaba con cierto instrumento dorando dotado de dos púas mediante el que se los llevaba a la boca. Sus estancias, asimismo, se hallaban tan impregnadas de incienso y perfumes diversos que me resulta nauseabundo referirme a ellos, y pienso que a mis lectores les costará trabajo creer mis palabras. La vanidad de esta mujer, sin embargo, resultaba odiosa a los ojos de Dios Todopoderoso, e Él, sin duda, ha descargado Su venganza. Alzó sobre ella la espada de Su justicia divina corrompiendo su cuerpo, marchitando sus extremidades y llenando su alcoba de un hedor insoportable (...) Así, tras un lento declinar y unos atroces sufrimientos, exhaló su último suspiro para gozoso alivio de sus amigos.

Lo cual más o menos viene a significa: "¡Es una mujer, y encima osa lavarse con agua limpia, perfumar su habitación y comer con tenedor en lugar de meter los dedos en el plato! ¡Pecado mortal! ¡Merecía morir entre atroces sufrimientos! No como yo, por supuesto, que soy un dechado de virtudes.
Esta evidente falta de compasión, de caridad y de misericordia, muy poco cristiana, demuestra además la nula higiene que se traían los medievales en general, y este señor en particular.

-Santa Helena:

Emperatriz romana, madre el emperador Constantino, su principal gracia consiste en haber convencido a su hijo de convertirse al cristianismo (y hacerla religión oficial del Imperio Romano). Muy buena obra, de no ser porque algunos de los métodos que usó para encontrar la Vera Cruz no fueron, cómo decirlo finalmente, piadosos.
O si alguien que me lea considera que es digno de un santo y una imitación de las virtudes de Cristo irse a Jerusalén, preguntar a los sabios judíos dónde estaba la Vera Cruz (ya me diréis qué iban a saber los pobres hombres, si la crucifixión de Cristo pasó desapercibida en su momento y a los judíos en particular, al no convertirse al cristianismo, la cruz donde fue crucificado se la traía bastante al fresco), y como lógicamente los pobres hombres no supieron qué contestarle, santa Helena no tuvo otra feliz idea que mandarlos torturar a todos hasta que alguno de ellos confesara. Al final se supone que la tortura dio resultado y encontró la Vera Cruz, aunque creo que con todos los fragmentos que hay repartidos por el mundo se podrían recomponer seis leños...

-Martín Lutero:

Ya oigo a quien me acuse de ir en contra de Lutero porque era protestante. Pues no, es más, debo admitir que siento simpatía por muchos de los preceptos de protestantismo, aparte de que en el contexto histórico en que surgió estaba totalmente justificado y era hasta necesario. No; la cuestión por la que Lutero entra en mi lista es , entre otras cosas, por su furibunda misoginia y su desprecio hacia las mujeres, manifestado en perlas como estas:

"Las mujeres estériles son débiles y poco saludables; aquellas bendecidas con muchos hijos son más saludables, limpias y alegres. Pero si eventualmente se agotan y mueren, no importa. Que mueran dando a luz, que para eso están".
Vamos, que las mujeres no son seres humanos, son fábricas de niños. Y si se rompe una, compre usted otra.

"Las niñas empiezan a andar y a hablar antes que los niños porque las malas hierbas crecen siempre más rápido que las buenas semillas".
Para que no parezcan superiores, las compara con un vegetal y se queda más ancho que alto.

-San Agustín de Hipona:

Volvemos al catolicismo, pero seguimos en la misoginia. San Agustín debería ser el santo más odiado por todas las mujeres cristianas del mundo, ya que fue él quien sentó las bases de la feroz misoginia eclesiástica que aún se sigue arrastrando hoy en día en el catolicismo (por ejemplo, en el hecho de que las mujeres tengan prohibido ser sacerdotisas, como si ser mujer nos hiciera indignas de ese sacramento). Este hombre, que sería muy leído pero que tenía de humilde, misericordioso y caritativo lo que yo de portera de fútbol, dejó para la posteridad frases como estas, que encima mucha gente creyó como si hubieran sido predicadas por Cristo en persona (sí, el mismo Cristo que tomaba por discípulas a las mujeres y las consideraba iguales en dignidad a los varones):

"Ya sea esposa o madre, es Eva, la tentadora, de quien debemos cuidarnos en toda mujer. No alcanzo a ver qué de utilidad puede servir la mujer para el hombre, si se excluye la función de concebir niños".
Otro como Lutero, que cree que las mujeres son máquinas de hacer niños. Curioso que a pesar de ello insista en Eva y se olvide de María, por la cual vino la salvación al mundo al dar a luz a Jesús.

"Las mujeres no deben ser iluminadas ni educadas de forma alguna. De hecho, deberían ser segregadas, ya que son causa de involuntarias e insidiosas erecciones en los santos varones".
Y se quedó tan pancho. Me sorprende que no inventara el burka.

"Nada rebaja tanto la mente varonil de su altura como acariciar mujeres".
Este hombre tenía algún tipo de trauma, ¿no?

"La mujer es un ser inferior y no está hecha a imagen y semejanza de Dios".
Y encima, ahora, suelta una herejía en contradicción directa con el Génesis.

"El padre tiene que ser más amado que la madre y merece mayor respeto porque su participación en la concepción es activa y la de la madre simplemente pasiva y material".
Ahora demuestra, además, que desconoce cómo nacen los niños, porque parece no tener ni idea de que era la mujer quien llevaba al niño en la barriga y quien se jugaba la vida dándolo a luz, mientras que el padre se limitaba a meterla cinco minutos y a olvidarse del tema.

Si a estas alturas aún os estáis preguntando cómo es posible que este hombre fuera canonizado, y en qué criterios se basaron para subirlo a los altares, no os preocupéis; no sois los únicos.

Aparte de Lutero y Agustín, en el club de la misoginia también tenemos a muchos otros muchachos, demasiado numerosos para enumerarlos a todos, entre los cuales se cuentan:

-San Pablo: "Las mujeres callen en las iglesias, que no les está permitido hablar durante la reunión. Deben quedarse en silencio, como manda la Ley. Si quieren saber más información, que se la pidan a sus maridos en casa, pues no está bien visto que una mujer hable en una asamblea". "La mujer aprenda en silencio con toda sumisión, pues no permito a la mujer que enseñe, ni que domine al hombre, sino que esté en silencio".
Las palabras de San Pablo son especialmente graves en cuanto se redactaron cuando los cristianos eran mucho más fieles al mensaje de Cristo y las mujeres actuaban en igualdad con los hombres en las iglesias, ocupando algunas de ellas cargos de importancia e incluso de sacerdocio, algo que San Pablo no aprobaba en absoluto. No deja de ser irónico que este hombre haya sido la figura más escuchada e imitada por generaciones sucesivas, cuando a diferencia de los apóstoles NO conoció a Cristo en persona. Entre él y Tertuliano, otro misógino de mierda considerado doctor de la Iglesia, consiguieron cargarse por completo lo que en el paleocristianismo era una realidad: la igualdad entre mujeres y varones a todos los efectos, sacerdocio incluido.

-San Juan Crisóstomo: Otro que odiaba furibundamente a las mujeres, atribuyéndoles con toda tranquilidad la culpabilidad colectiva del pecado en el mundo y de todos los males de la humanidad: "¿No sabéis que cada una de vosotras es una Eva? (...) Vosotras sois la puerta del infierno.Tú eres la que empezaste el árbol prohibido.Tú eres la primera que desertaste de la ley divina.Tú eres la que le corrompió a él, a quien el diablo no se atrevió a atacar. Por causa de tu mérito, que es la muerte, incluso el Hijo de Dios tuvo que morir".
Vale, podríamos decir, este tío odia a Eva porque le echa la culpa de todo (lo de que la serpiente y no ella fuera la primera tentadora, o lo de que Adán también se comiera alegremente la manzana cuando habría podido negarse, parece que se la trae al fresco). Pero, ¿qué tienen que ver en esto la restantes mujeres de la Humanidad? Nuestro simpático amigo nos lo aclara en un instante:
"No sólo Eva sufrió el engaño, sino que "la Mujer" fue engañada. La palabra "Mujer" no debe aplicarse a una, sino a todas las mujeres. Por tanto toda la naturaleza femenina ha caído en el error".
Tócate los huevos con la conclusión a la que llega este hombre. Seguro que me puede explicar cómo todas esas mujeres fueron engañadas si aún no habían nacido. ¿Alguien más piensa que este tío era un gayer reprimido o que la niña mona de su pueblo le dio calabazas cuando intentó sacarla a bailar en las fiestas del pueblo?

-Santo Tomás de Aquino: "La mujer es defectuosa y mal parida, desde el momento en que la fuerza activa de la semilla masculina tiende a la producción de la similitud perfecta en el sexo masculino; mientras que la producción de una mujer deriva de un defecto en la fuerza activa o de alguna indisposición material, o de alguna influencia externa".
Nuestro amigo Tomás me recuerda a una cosa que le dijo mi tío el anestesista a una monja que le puso exceso de anestesia a un paciente por error: "Usted sabrá mucho de Dios, pero de medicina no tiene ni puta idea". Me pregunto si alguien le propuso a Santo Tomás que contara cuánto creía que iba a tardar la humanidad en extinguirse si las semillas dejaban de ser defectuosas y el mundo se llenaba exclusivamente de varones.

Habrá quien me diga que estos señores no hacían más que expresar lo que era una opinión más o menos generalizada en sus tiempos, y que hay que leerles en su contexto. Esto sólo es verdad hasta cierto punto. En primer lugar, tengamos en cuenta que estos señores son los llamados Padres de la Iglesia. Es decir, los que sentaron la doctrina que imperó en los siglos sucesivos. En segundo lugar, recordemos que la santidad viene de seguir a Jesucristo, no las modas o las opiniones imperantes. Jesús no seguía las modas, Jesús fue un innovador, un rabino que escandalizaba por tomar a mujeres como discípulas y tratarlas como iguales. El que dijo "no juzguéis si no queréis ser juzgados". Era el Hijo de Dios, el Mesías, y eligió a tres mujeres para que fueran las primeras que lo vieron resucitado y llevaran la noticia a los demás, las mismas tres mujeres que permanecieron a su lado hasta el final cuando los hombres lo negaban o huían. Que Agustín, Pablo, Tomás de Aquino y Juan Crisóstomo odiaran y despreciaran a las mujeres de ese modo no los hace distintos a la mayoría de hombres de su época, pero por eso precisamente, tampoco los hace santos. Porque su forma de sentir, de hablar y de pensar en este sentido era radicalmente contraria a la forma en que sentía, hablaba y pensaba Cristo.

-San Cirilo de Alejandría:

Este es conocido a raíz de la (lamentable y poco fiel a la Historia) película sobre Hypatia de Alejandría. Sin embargo, películas aparte, es cierto que este hombre tenía poco de santo. Para empezar, era un hombre bastante fanático, que odiaba a los judíos, a los paganos y a las mujeres (no necesariamente en ese orden).
Además de instigar varios pógromos contra judíos que se saldaron con bastantes víctimas, les expropió las sinagogas, las propiedades, y finalmente los expulsó por las buenas de Alejandría, al más puro estilo Adolf Hitler, lo cual cabreó bastante al emperador Teodosio II de Constantinopla porque encima Cirilo ni siquiera tenía derecho legal a tomar semejantes medidas.
También instigó ataques y agresiones contra los paganos. Una de sus víctimas más famosas en este sentido fue la pobre Hypatia, una pagana neoplatónica muy bien relacionada entre las familias pudientes cristianas porque era una famosa preceptora y educadora que tenía amistad incluso con Orestes, el prefecto bizantino en Alejandría. Como además de ser pagana era mujer, inteligente y bien relacionada política y socialmente, Cirilo le tenía un odio que no te cuento, de modo que fue el instigador de un grupo de fanáticos que la asaltaron cuando regresaba a su casa tras una jornada de enseñanza y la violaron en grupo para luego descuartizarla viva. La pobre señora tenía unos 60 años en el momento de su muerte.
Nuevamente, no sé quién tuvo la idea de canonizar a un fanático violento, lleno de odio, que instigó más de un asesinato.


De momento, estos son bastante ejemplos para ilustrar lo que quería decir en esta entrada. Y dicho todo esto, quiero dejar clara otra cuestión: estas personas no eran Dios. No eran un ejemplo. Ni siquiera eran cristianos ejemplares, y nunca debieron ser canonizados. Sus palabras ni son reflejo ni tienen nada que ver con el mensaje de Jesús, por eso me duele tanto que se empleen como supuesta prueba de que el cristianismo es misógino, intolerante o absurdo.
Los que sí eran misóginos, intolerantes y absurdos, fueron los que tuvieron la brillante idea de elevar a los altares a este tipo de gentuza.

jueves, 10 de enero de 2013

Crítica de "Los Miserables"

No me refiero a la novela de Víctor Hugo (no la he leído aún, pero ya caerá), sino a la película estrenada recientemente en el cine. ¿Veredicto? Me ha ENCANTADO. Está nominada a 8 Óscars incluyendo las categorías de Mejor Película, Mejor Actor y Mejor Actriz de Reparto, y si por mí fuera se los concedía todos. Ya.
Hay quien dice que había que hacerlo muy mal para no sacarle buen resultado a un musical que lleva décadas paseándose con rotundo éxito por los mejores teatros del mundo. Y no les falta razón. Pero también es cierto que por buena que sea la materia prima hay que ser un artista para poderla transformar en una buena obra de arte, y en esta película lo consiguen. Con creces.

 Si no te emocionas con esta película, eres un cadáver


La historia es de sobra conocida: Jean Valjean, un ex convicto que fue condenado a trabajos forzados por robar una barra de pan, consigue hacer fortuna y decide ayudar a Fantine, una pobre mujer que se ha visto arrojada a la prostitución para poder mantener a su pequeña hija, Cosette. Las peripecias y las buenas acciones de Jean Valjean se verán continuamente perturbadas por la presencia del inspector Javert, que no cree en la reinserción social ni en la redención de los delincuentes.
En torno al argumento, giran tres factores fundamentales: la banda sonora, los personajes y el escenario. Cada cual más perfecto que el anterior, contribuyendo lo que podría haberse quedado tan sólo en una decente versión del musical en toda una obra maestra. Todos los actores están inmensos, perfectos en su papel: desde el maestro Hugh Jackman, que demuestra una vez más que vale para mucho más que para hacer de guaperas y mostrar músculo, hasta Anne Hathaway con su desgarradora interpretación de Fantine, todos son sublimes. Russell Crowe es quizás quien menos sobresale del elenco, aunque realiza una correctísima interpretación de Javert. Pero no es que Crowe lo haga mal, es que se limita a hacerlo muy bien rodeado de un elenco que alcanza la perfección. Un notable en un mundo de matrículas de honor, por decirlo de alguna manera.
Y de la banda sonora, ¿qué se puede decir que no se haya dicho ya? Sublime, maravillosa, perfecta, emocionante, épica. Algunos actores, como Colm Wilkinson (el obispo de Digne) o Samantha Barks (Eponine) formaban parte del elenco original del musical de Broadway. Los protagonistas, sin embargo, no son cantantes profesionales, y aún así, no deslucen en la película. Algunas personas han objetado que Jackman y Crow no lo hacen tan bien como los cantantes profesionales de los musicales teatrales, y no es que yo vaya a discutirlo, pero tienen nivel más que suficiente para entonar, sorprender y emocionar. Y al fin y al cabo el espectador que acude al cine no va a ver un concierto, sino una película. Un musical, pero película al fin y al cabo. Tengo que reconocer que, si bien se nota que en última instancia son actores y no cantantes, me encantó su interpretación y creo que lo hacen muy bien. Por supuesto, el hecho de que canten ellos mismos (¡y durante la grabación de las escenas, no en estudio!) le da un toque de emoción y realismo a la película que la hace subir muchísimos puntos.
Y finalmente, la fotografía y los decorados son alucinantes. En ocasiones parecen algo teatrales, pero siempre quedan estupendos. Algunos de ellos (el arsenal marítimo que sale al principio, por ejemplo) no habrían podido ser jamás recreados de esa manera en un teatro, y su espectacularidad engrandece la película.
Por último, debo decir que la película dura más de dos horas y media y a pesar de ello se pasa volando, no aburre, mantiene un ritmo perfecto y emociona hasta las lágrimas. Me pasé los diez últimos minutos de la película llorando a lágrima viva de pura emoción, y cuando aparecieron los títulos de crédito me dieron ganas de levantarme y aplaudir durante diez minutos seguidos, como si estuviera en el teatro. Esta película es imprescindible, la recomiendo a TODO el mundo. Si no habéis ido a verla todavía, corred mientras aún la haga en el cine: no os arrepentiréis. Es una auténtica joya, de lo mejorcito que he visto en años (con permiso de la fantástica El Hobbit, por supuesto. ¡Este año el cine viene pisando fuerte!).
¿Algún pero? Bueno, vale, seamos críticos. Principalmente, los subtítulos, en mi opinión mediocremente traducidos. Y por supuesto hay que tener en cuenta la temática de la película: es un dramón, precioso, pero un dramón. Si no te gusta sufrir por los personajes y sólo aceptas finales felices made in Hollywood de color rosa y con sabor a piruleta, esta no es tu película.


Detallitos, con SPOILERS (aunque el argumento es vox pópuli, la verdad):


Lo que me ha gustado:

-Las actuaciones. Todos, todos, todos los actores están inmensos. Mención especial para los niños que hacen de Gavroche y Cosette, para la magnífica Anne Hathaway (su interpretación de I dreamed a dream hizo que se me saltaran las lágrimas) y para el maestro Hugh Jackman, mi actor favorito, que con su interpretación de Jean Valjean me deja aún más rendida a sus pies, si cabe.

-Los personajes. Son desgarradores, tiernos, profundamente humanos. Tendrán sus luces y sus sombras, por eso sólo los hace más reales. Víctor Hugo era (y sigue siendo) un maestro. He sufrido de verdad junto a Jean Valjean, Fantine, Eponine y los revolucionarios. También me gusta muchísimo el obispo de Digne, un auténtico santo en vida. Si todos los obispos fueran así, la Iglesia sería lo que siempre ha debido ser.

-La banda sonora. Maravillosa, épica, monumental. En especial, las canciones I dreamed a dream y Do you hear the people sing?

-La historia. Si ves Los Miserables y no te emocionas, es que estás muerto.

-Y la fotografía, el montaje, el maquillaje, el vestuario...

-La escena inicial y la escena final. Para quitarse el sombrero e hincar la rodilla. Sobre todo los últimos diez minutos. Hacía años que no lloraba tanto en un cine.


Lo que no me acaba de convencer:

-Durante algunas canciones se abusa un poco de los primeros planos de los actores.

-Los personajes de Sacha Baron Cohen y Helena Bonham Carter acaban siendo un poco cansinos al final.


Lo que no me ha gustado:

-No me gusta la historia de amor entre Marius y Cosette; me parece muy irreal, no se conocen de nada, cruzan miradas un instante, y ya están locamente enamorados. Hubiera preferido mil veces que Marius se quedara con Eponine, que es su amiga, lo conoce, y lo ama tanto que es capaz de dar su vida por él (la verdad, no me imagino a Cosette saltando para recibir una bala en lugar de Marius). El amor de Eponine es verdadero y profundo; Marius y Cosette en cambio no se han enamorado en verdad el uno del otro porque no se conocen. Marius no ama a Cosette, sino al ideal de amor perfecto que ella representa, y lo mismo se puede decir de Cosette respecto a Marius.

-Los subtítulos. El traductor ha hecho algunas traducciones demasiado libres para mi gusto; debería haber sido más fiel a los diálogos originales.


martes, 1 de enero de 2013

Premios Daeva 2012

¡Feliz año nuevo a todos! Aunque un poco tarde (por lo general suelo hacerlo antes de que acabe el año), aquí viene el post con los Premios Daeva 2012, una idea que llevo repitiendo desde hace algún tiempo y que premia las cosas más hermosas que he visto, contemplado o vivido a lo largo del año. Me fastidia no haberlos podido postear ayer, pero una desafortunada gastritis me tuvo todo el día hecha polvo y me impidió postear (con decir que mi cena de Nochevieja se compuso de una taza de caldo de pescado, una rebanada de pan, y doce uvas...).
En fin, sin más dilación, aquí están los ganadores:


TERCER PREMIO: LA PELÍCULA "EL HOBBIT"


Largo tiempo hemos tenido que aguardar los tolkiendili hasta que ha llegado a las pantallas la primera película de la trilogía de "El Hobbit". Debo admitir que, como todos, andaba yo con miedo de que el señor Peter Jackson se hubiese liado a inventar cosas y hubiera hecho un churro, pero por fortuna no ha sido (exactamente) así. La película tiene una maravillosa banda sonora, muy buenas actuaciones, e imágenes sencillamente impresionantes; sólo los primeros minutos, con sus maravillosas escenas en Erebor y Ciudad del Valle, ya justifican su merecidísimo tercer premio.


SEGUNDO PREMIO: NORMANDÍA



Fue para mí muy especial este año poder visitar Normandía y Bretaña y visitar de primera mano los escenarios del Desembarco en la Segunda Guerra Mundial. Fue un viaje muy interesante, donde además de tocar, ver y respirar Historia en estado puro, tuve la oportunidad de ver paisajes preciosos, entre los que se cuentan la playa de Arromanches con niebla y marea baja, un ambiente irreal y onírico que me hizo sentir que estaba en otro mundo, el complejo de búnkers, baterías antiaéreas y prado lleno de enormes cráteres causados por los bombardeos de mar (pepinos de mar, que los llamaba yo) de Point-du-Hoc, o los acantilados de Etretat, que son los que aparecen en la foto que he seleccionado para ilustrar la costa normanda.


PRIMER PREMIO: MIS RATITAS



Este año, una de las mayores alegrías que hemos tenido ha llegado a casa en forma de cuatro ratitas: Arya, Cersei, Daenerys y Sansa, que han venido para hacer compañía a nuestra vieja y querida Turquesa. Desde el principio, se comportaron muy bien con ella, convirtiéndola de inmediato en una más de la familia, y a mí me faltan palabras para decir lo guapas que son, lo brillante que tienen el pelo, lo bien que huelen, lo simpáticas, listas y cariñosas que son, y lo mucho que nos alegran la vida día tras día. Cuando las recogimos estaban hechas una pena; no las habían tratado bien, estaban mal alimentadas, olían mal y tenían sarna, por culpa de haber estado viviendo en una jaula sin higiene y con poca comida en casa de una persona que no sabía ocuparse de ellas. Nosotros las llevamos al veterinario, les conseguimos un hogar grande, limpio y lleno de juguetes, las alimentamos bien y les dimos cariño, y el cambio fue espectacular; en poco tiempo estaban gorditas, sanas como manzanas, con el pelo brillante, y olían de maravilla. Daenerys, por ejemplo, parecía un ratoncito blanco cuando llegó de lo pequeña y raquítica que era y ahora la llamamos la rata-vaca, parece una bola de pelo blanco XDD
Por ser tan guapas, tan  buenas, tan suaves como un peluche, por hacer las delicias de la casa con sus travesuras, por darnos su cariño, y por ser un encanto de ratitas, las cinco princesas de nuestra casa se llevan el primer premio de este año :-)